No lo creo. Las doctrinas de la Iglesia Católica Romana no proceden de la Biblia, sino que las heredaron del culto pagano de Babilonia. No es que nosotros lo digamos, sino que la Biblia y la historia humana hartamente ha probado que es así. La iglesia de Laodicea, reinante en el día actual, es una que ha tenido un encuentro con Jesús, pues este conoce sus obras. La falla de esta iglesia es que confundió "que obtener cada día más riquezas materiales no necesariamente significa que tenemos la bendición de Dios. Tampoco el aumento en miembresía denota rectitud ante Dios. Ambas cosas son muy necesarias, pero hay que tener cuidado y no interpretar lo superficial con lo verdadero. Cuando entendemos que somos los dueños de toda la verdad, en realidad estamos en el espíritu de Laodicea. Apocalipsis 3:19 prueba que esta iglesia Cristo la reconocía como suya. Leemos allí: "Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete". El mensaje que Jesús le dio a la ilgesia de Laodicea sin duda se lo está dando ahora mismo a la inmensa mayoría de las iglesias que hoy se creen estar bien con el Señor. Hoy los concilios miden el éxito de una congregación y su pastor por sus muchos miembros y por las aportaciones monetarias que les envían. El mensaje de Jesús a esta última iglesia del Siglo 21 es sencillo: "Sé celoso, y arrepiéntete". ¿Celoso de qué? De guardar su palabra, de imitar a la iglesia de Éfeso, sin dejar el primer amor. ¿Arrepentirse de qué? De su descuido de no seguir las intrucciones que nos dejó Jesús en la Santa Biblia, que la llevó a medir su victoria sobre fundamentos de arena, y no de la piedra angular, Cristo. Todavía hay tiempo para regresar a la ruta Divina. Nota al calce: Bendiciones a los amigos de México que ayer se reportaron, y escucharon nuestra emisora www.aguiladereformacion.com. También la Federación de Rusia se reportó. Salud, y seguimos orando por todos.
No comments:
Post a Comment