Los países árabes y islámicos tienen dinero de sobra para comprar al peor de sus enemigos, y lo están logrando en las Naciones Unidas. Aunque muy poco se da a conocer abiertamente, es sabido a la saciedad que Israel está solita. Aún la administración de Obama le está jugando lo que en mi barrio se conoce como el "juego de la doble vara". Como un claro ejemplo, tomemos a la nación del Pacífico Palau. A esta los Emiratos Árabes se dice le ofrecieron $50 millones si empezaba a votar contra Israel. Esto le recuerda a muchos el caso de las Islas Salomón del Pacífico empezó a votar contra Israel en el 2009. Nadie entendía cómo era posible eso. Pronto debe ocurrir la profecía de marras de este artículo, donde leemos: "Por eso, hijo de hombre, profetiza contra Gog y adviértele que ásí dice el Señor omnipotente: EN AQUEL DÍA, ¿acaso no te enterarás de que mi pueblo Israel vive confiado? Vendrás del lejano norte, desde el lugar donde habitas, JUNTO CON OTROS PUEBLOS (NACIONES) numerosos. Todos ellos vendrán montados a caballo, y serán una gran multitud, un ejército poderoso. EN LOS ÚLTIMOS DÍAS ATACARÁS A MI PUEBLO ISRAEL. Yo como un nubarrón cubrirás el país. Yo haré que tú, Gog, vengas contra mi tierra, para que las naciones me conozcan y para que, por medio de ti, mi santidad se manifieste ante todos ellos". La expresión "haré que...vengas" demuestra la soberanía del Dios verdadero. Sin duda entonces, como hoy, las naciones pensarán que son ellos los que planifican la destrucción del pueblo de Dios, cuando en realidad es ese Dios Nuestro que tiene la última palabra. Y creame usted, los enemigos de Israel están sentenciados a desaparecer del mapa mundial cuando vengan a invadir a Israel. El juicio final de Satanás lo encontramos en Apocalipsis 20:7-10, y esas naciones de Gog y Magog son resaltadas recibiendo el peor de los castigos. Ciertamente el escenario que nos pinta las noticias de inteligencia hoy develan el día final a que estamos llegando a velocidad exagerada. Arregla tu vida con el Señor tu Dios. Voy a ti siempre, siempre, siempre.
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