Monday, May 30, 2011

Lo que no se usa, se muere, dice la ciencia.....

"Úsela, a se arriesga a perderla del todo". Ese es el pensar del Dr. Walter Risich, Profesor de Gereontología del Recinto de Ciencias Médicas, UPR, y que publicó el Nuevo Día en su edición del 24 de mayo, 2011. El tema toca más bien a las personas que ya tienen sus añitos. Este, entendemos nosotros, intenta alentar a las personas de la tercera edad  de que usted no necesariamente tiene que perder su memoria solo porque no es tan joven, sino porque no la usa. Y si no la usa, pronto morirá porque dicen estos que lo que no se usa, se muere. Este pone de ejemplo a Eistein, Miguel Ángel y Goethe, que empezaron a producir ya viejos. Una parte del trabajo señala: "Según envejecemos, las células musculares disminuyen en número, sin embargo las que quedan aumentan de tamaño.A mayor intensidad y fuerza enpleada en el ejercicio realizado, mayor la masa muscular" Este añade algo demasiado importante sobre el cérebro: El cérebro muestra un fenómeno similar: A mayor intensidad del uso de sus facultades mentales, mayores serán las conexiones entre las neuronas. El examen postmorten del cerebro de Eistein demostró que no tenía más neuronas que cualquiera de nuestros legisladores, pero estaban extraordinariamente conectadas o alambradas entre sí". Leyendo este artículo durante esta semana descubro que esto está cónsono con las Escrituras. Antes que nada, debemos saber que Dios nunca llamó a un vago para un ministerio. Noten en la Biblia que todos estaban muy ocupados. Más importante, cuando llegaron a edad avanzada estaban como el vino viejo. Aún a minutos de expirar Jacob pudo bendecir a cada uno de sus hijos, profetizarle sobre lo que venía hasta este Siglo 21, ect. (Génesis 49). Moisés nunca perdió su vigor, ni aún su visión, porque siempre estuvo usándolos para el trabajo que Jehová Dios le encomendó )Deuteronomio 33-34). Cuando ya era más viejo que el frío, como decían en mi Barrio Toita de Cayey, el Apóstol Juan recibió el Apocalipsis en la Isla de Patmos. ¿Qué tu esperas recibir de Dios hoy.

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