Que triste es cuando el padre quiere cumplir con sus hijos, y no puede.....

Tenemos governantes hoy a nivel mundial como Acab en los tiempos de Elías. Este reinó 22 años y hizo lo malo ante los ojos de Jehová (1 Reyes 16). Este pensó que todo tenía un comienzo, pero no un final. Acab jamás penso que el humilde hombre de Dios nada podría hacer nada contra Superman: El. Pero Elías tenía lo que le faltaba a Acab: Cérebro, fe de Dios, y valor. Acab se paró ante Superman, y le sentenció con la autoridad de Dios: "Vive Jehová Dios de Israel, en cuya presencia estoy, QUE NO HABRÁ LLUVIA NI ROCÍO EN ESTOS AÑOS, SINO POR MI PALABRA". Pero, ¿no recordaba el hombre de Dios que él era parte de ese territorio, con los mismos peligros del resto de la población? Claro que el los conocía de primera mano. Más importante para y para usted y yo: Elías no pensó en él porque Dios era responsible de su bienestar, cualquiera fuera. Tan es así, que cuando Jehová le ordenó: "Apártate de aquí, y vuélvete al oriente, y escóndete en el arroyo de Querit, que está  frente al Jordan", sin encomendarse a nadie, como dice el Jibaro nuestro, se fue al Arroyo de Querit. Allí recibió la promesa de Dios: "Beberás del arroyo, Y YO HE MANDADO A LOS CUERVOS QUE TE DEN DE COMER" (1 Reyes 17). ¿Un cuervo como mesero privado nuestro? Ni lo dudes un minute (otro dicho pueblerino). Y ocupados que estuvieron los bendecidos de Jehová de servirle a su siervo Elías, pues en las mañanas le traían pan y carne, y lo mismo por las tardes. Nota al  calce: Cuando la Biblia dice "pasados algunos días" quiere decir que se extendió un period grande, a tal extreme que el Arroyo se secó del todo. Los demonios que habían por sus alrededores buscándoles fallas al hombre de Dios (los hay hoy también) pensaron que este era un derrotado. Sin embargo, Dios había preparado una viuda para que lo alimentara. Y tal parece que Elías le pidió tanta comida que ya no había nada en la lacena. Oiga usted, que atrevido, solo había harina para mitigar la hambre por un rato, y después morirse. El hombre de Dios lo sabía, y como sabía que el problema de el sobrevivir era de Jehová, le dijo, traed la primera a mi, no a tu hijo. El resto tú lo sabes. Atiende tú, hermano y amigos,las cosas de Dios, y deja a Jehová con el problema de alimentarte a ti y los tuyos. ¿Teología 101: Pon las cosas de Dios primero en tu vida, y deja al Señor que supla tus necesidades. Recuerda: Si lo haces, no faltará harina en la lacena. Voy a ti siempre, siempre, siempre.