Es una lastima que algunos creyentes jamás albergarán ángeles en sus hogares por su falta de hospitalidad. La presencia de ángeles en los hogares no son simplemente historias que le ocurrieron a ciertos hombres de Dios, sino que pueden ser para usted en el Siglo 21. Pedro escribió: "Hospedaos los unos a los otros sin murmuraciones. Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros como Buenos administradores de la multiforme gracia de Dios" (1 Pedro 4:9-10). Santiago añade: "Y si un hermano o una Hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de cada día, y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovechas?". Historia veridical: Desde niño asistimos a la Iglesia Bautista de Toita, en Cayey, y notamos que el cristianismo hoy es diferente a los años 40s, 50s, 60s. Recordamos que nos enseñaron a preocuparnos porque nuestros vecinos pobres tuvieran lo mismo que nosotros. Así como lo escucha. Inclusive no se acostumbraba que la ropa estuviera vieja para regalarla. Y quienes recibían nuestras vestimentas se gozaban muy en grande. Esa preocupación por nuestros prójimo, y el agradecimiento de recibir un obsequio de un hermano era genuine...se notaba. Los líderes de Iglesias hoy día predican sobre los diezmos, que de dar al projimo, que la Biblia dice que es mucho major. "Shame of you".
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